La ciencia y la vida cotidiana
no pueden ni deben separarse.
La duda es el principio de la sabiduría.
Equipado con sus cinco sentidos, el hombre explora el universo que lo rodea y a sus aventuras las llama ciencia.
El tiempo todo lo da y todo lo quita;
todo cambia, pero nada perece.
Nada en este mundo debe ser temido, solo entendido. Ahora es el momento de entender más, para poder temer menos.
La verdad siempre se encuentra en la simplicidad, y no en la multiplicidad y confusión de las cosas.
No tengo talentos especiales,
pero sí soy profundamente curioso.